El pasado sábado, el mundo del rugby y del Ejército chileno sufrió una pérdida inesperada. Nicolás Álvarez Ramos, un joven cadete del tercer año en la Escuela Militar, falleció tras sufrir un accidente en un partido de rugby. Nicolás, oriundo de la localidad de Rapel, en la comuna de Monte Patria, era conocido por su amor a los deportes, en particular al rugby.
Durante el encuentro entre el equipo de la Escuela Militar y Diablos, de la carrera de Ingeniería de la Universidad de Chile, Nicolás sufrió un golpe en la cabeza durante un tackle que lo dejó inconsciente. A pesar de los esfuerzos inmediatos de los equipos de primeros auxilios y del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU), Nicolás no recuperó la conciencia. Fue trasladado a una clínica de Santiago, donde fue conectado a un ventilador. Sin embargo, su estado no mejoró y el martes se confirmó su deceso.
Como era su voluntad, la familia de Nicolás tomó la difícil decisión de donar sus órganos. Un gesto que sus amigos y conocidos consideran representativo de su espíritu generoso y solidario. Carla Cortés, amiga de la adolescencia de Nicolás, recuerda que siempre se mantuvo en contacto con su grupo de amigos más cercanos y que su amor por el deporte era evidente. «Siempre le gustó el deporte, por eso no fue sorpresa que se integrara al Ejército. Participaba en varios equipos de distintos deportes, aunque últimamente se había dedicado al rugby», afirma.
Tras confirmarse su muerte, el Ejército anunció la apertura de una investigación sumaria administrativa para esclarecer las circunstancias del accidente. A través de sus redes sociales, la Escuela Militar expresó su pesar por la pérdida de uno de sus camaradas y extendió su apoyo a la familia de Nicolás en estos momentos difíciles.
La noticia de la muerte de Nicolás ha impactado a la comunidad de la comuna de Caldera, donde residía con su madre, Froilana Ramos, profesora del colegio Manuel Orella Echanez. El concejo municipal de la comuna envió sus condolencias a la familia. Sus compañeros de la Escuela Militar y de otros equipos de rugby de diferentes zonas del país también han compartido emotivos mensajes en las redes sociales en su memoria.
En los años 2018 y 2019, Nicolás destacó en el Ovalle Rugby Club, dejando una huella imborrable en sus compañeros de equipo. Según Miguel Pizarro, cercano a la familia de Nicolás, los padres del joven están muy impactados por lo sucedido y actualmente se encuentran en Santiago realizando los trámites para trasladar el cuerpo de su hijo a su natal Monte Patria.
En las próximas horas, se llevará a cabo el traslado de los restos de Nicolás para realizar sus funerales en Monte Patria. Una delegación del Ejército asistirá a la ceremonia para despedir a Nicolás con honores militares, en reconocimiento a su servicio y a su compromiso con la institución.
La muerte de Nicolás Álvarez Ramos es un recordatorio de los riesgos inherentes a la práctica deportiva. A pesar de ello, su pasión por el rugby y su espíritu de camaradería perdurarán en la memoria de todos aquellos que tuvieron la oportunidad de compartir con él dentro y fuera del campo de juego.