La Agencia Espacial Norteamericana (NASA) ha logrado un avance significativo en la recuperación de la comunicación con la sonda espacial Voyager 1. La sonda, que había presentado problemas a finales de 2023, había comenzado a enviar información sin sentido de vuelta a la Tierra, dejando a los científicos perplejos y trabajando sin descanso para resolver el problema.
La Voyager 1 es una sonda única, no solo por su misión, sino también por su historia. Fue lanzada al espacio en 1977 con el objetivo principal de estudiar el sistema solar exterior y viajar más allá de la heliósfera del Sol. Hoy en día, la sonda se encuentra a 24 mil millones de kilómetros de la Tierra, más lejos de lo que cualquier otro objeto creado por los humanos ha llegado jamás.
Además de sus instrumentos científicos, la Voyager 1 lleva una carga simbólica muy especial: un disco de oro que contiene un mensaje de los humanos, destinado a ser encontrado por alguna forma de vida extraterrestre inteligente. Este disco está diseñado para ser una especie de tarjeta de presentación de la humanidad, mostrando la diversidad de la vida y la cultura en la Tierra.
Según un informe reciente de la NASA, la Voyager 1 ha comenzado a enviar información útil nuevamente. Esto se produce después de una falla informática detectada en noviembre del año pasado. La agencia espacial ha logrado recuperar las comunicaciones de 2 de sus 4 instrumentos con los que envía datos a la Tierra. Los equipos de la misión ahora están trabajando para recalibrar los dos instrumentos restantes.
La tarea de restablecer la comunicación con la Voyager 1 ha sido un desafío enorme para los astrónomos. Fue solo en abril de este año cuando la Voyager pudo enviar datos de ingeniería que indicaban el estado de la sonda y sus instrumentos. El 17 de mayo, los científicos enviaron datos a la nave para probar si los recibía y si lograba aplicar los comandos. Después de dos días de espera, confirmaron que sí.
Actualmente, el subistema de ondas de plasma y el instrumento magnetómetro están proporcionando datos científicos utilizables. La misión continúa trabajando en el subistema de rayos cósmicos y el instrumento de partículas cargadas de baja energía.
A finales de este año, las Voyager 1 y 2 cumplirán 47 años en sus viajes interminables más allá del sistema solar. Son los únicos instrumentos a la fecha que exploran fuera de la heliósfera, la región del espacio influenciada por el viento solar de nuestra estrella. Esta misión histórica ha proporcionado una gran cantidad de conocimiento sobre el sistema solar y continúa desafiando los límites de lo que la humanidad puede lograr.
Mientras que la Voyager 1 continúa su travesía a través del espacio, los científicos aquí en la Tierra continúan trabajando en la ardua tarea de mantener las comunicaciones y recibir la valiosa información que la sonda envía. La Voyager 1, con su misión de explorar lo desconocido y su mensaje para formas de vida extraterrestre, es un recordatorio constante de nuestra curiosidad innata y nuestro deseo de explorar y entender el universo que nos rodea.