Charles Leclerc lidera los entrenamientos en el Gran Premio de Mónaco
El Gran Premio de Mónaco es conocido por su previsibilidad, lo que puede hacer que las carreras sean menos emocionantes. Sin embargo, los entrenamientos libres del inicio de este gran premio, celebrados el viernes, fueron una excepción. Los pilotos participaron en una serie de maniobras llenas de tensión, tanto en la parte superior como en la inferior de la tabla de clasificación.
Charles Leclerc, el piloto local, fue el más rápido. Cabe recordar que Ferrari ya demostró un rendimiento muy competitivo en Imola y parece dispuesto a repetir la hazaña en la prestigiosa cita monegasca. Esto fue especialmente notable en el monoplaza número ’16’, ya que Carlos Sainz tuvo dificultades y no se sintió cómodo. Sainz se encargó de realizar las pruebas y terminó en la sexta posición, mientras que su compañero de equipo Leclerc registró el mejor tiempo del día. Lewis Hamilton, que había dominado por la mañana, consiguió el segundo mejor tiempo, y Fernando Alonso se quedó en tercero.
Aston Martin, por su parte, trajo al Principado el nuevo alerón trasero que estrenó en Italia hace unos días, pero volvió a la especificación anterior del delantero, en un intento por encontrar el equilibrio óptimo. Alonso aprovechó estas mejoras para marcar un destacable tercer puesto en la sesión de entrenamientos. Sin embargo, no se libró de los muros del circuito, aunque sin sufrir mayores incidentes.
La presión que experimentan los pilotos en este fin de semana es evidente. La mayoría de ellos, incluyendo a veteranos como Alonso o Hamilton, y a los más jóvenes como Yuki Tsunoda o Logan Sargeant, se acercaron peligrosamente a los guardarraíles. Incluso Max Verstappen, tricampeón del mundo y máximo candidato a ganar, se mostró excesivamente sobreexcitado y fuera de la línea.
También hubo sorpresas en la división inferior, la Fórmula 2. Durante los entrenamientos de la F2, se produjo un incidente que pudo resultar en una tragedia. Los protagonistas fueron Ritomo Miyata e Isack Hadjar. Miyata tuvo un problema con su coche justo a la entrada del túnel, en Portier, lo que le obligó a apartarse para no obstaculizar el paso. Sin embargo, se apartó hacia el muro interior, lo que le hizo invisible para cualquier piloto que viniera detrás.
En el incidente, Hadjar asumió que la bandera blanca que parpadeaba solo indicaba una recomendación de reducir la velocidad y no una orden. Por tanto, lejos de reducir la velocidad, aceleró. Solo sus reflejos evitaron que embistiera violentamente por detrás a Miyata. A pesar del susto, la FIA no consideró necesario investigar el incidente. Este suceso probablemente provocará una revisión del protocolo de seguridad en futuras carreras.
A la luz de las emociones y las tensiones de los entrenamientos, el Gran Premio de Mónaco promete ser un evento emocionante. La igualdad en la parte superior de la tabla es extrema, con los cinco primeros pilotos (Leclerc, Hamilton, Alonso, Norris y Verstappen) perteneciendo a cinco equipos diferentes. Esto significa que la carrera podría ser cualquier cosa menos predecible.