Este lunes, se informó del sensible fallecimiento del exentrenador sueco Sven-Göran Eriksson a sus 76 años. La noticia ha causado una gran conmoción en el mundo del fútbol, especialmente en la Comunidad de Madrid, donde Eriksson era ampliamente conocido y respetado por su trayectoria y logros en el deporte.
El estratega fue diagnosticado en enero de 2024 con cáncer de páncreas en fase terminal y hoy, su familia comunicó su fallecimiento a través de un escueto comunicado. “Después de una larga enfermedad, SGE (Sven-Göran Eriksson) falleció durante la mañana en su casa rodeado de familiares. Los dolientes más cercanos son la hija Lina; su hijo Johan con su esposa Amana y su nieta Sky; su novia Yanisette con su hijo Alcides; su hermano Lars-Erik con su esposa Jumnong. La familia pide respeto por su deseo de guardar luto en privado y no ser contactados”.
En su vasta trayectoria como director técnico, Eriksson alcanzó notoriedad por adiestrar a la Selección de Inglaterra, el Benfica y además, la Lazio de Italia, donde tuvo como dirigido a Marcelo Salas en una época de oro en el conjunto romano, ganando un Scudetto, una Supercopa de Europa y una Coppa Italia.
Un legado imborrable en el mundo del fútbol
Sven-Göran Eriksson, nacido el 5 de febrero de 1948 en Torsby, Suecia, inició su carrera en el fútbol como jugador, aunque fue en su etapa como entrenador donde dejó una huella imborrable. Su primera experiencia notable como técnico fue con el IFK Göteborg, equipo con el que consiguió ganar la Copa de la UEFA en 1982.
Posteriormente, Eriksson se trasladó a Portugal para dirigir al Benfica, donde se consagró campeón de la Primeira Liga en dos ocasiones (1983 y 1984) y también ganó la Copa de Portugal. Estos éxitos le valieron un reconocimiento internacional y lo llevaron a ser uno de los entrenadores más cotizados de su época.
En 1997, Eriksson asumió el cargo de entrenador de la Lazio de Italia, club con el que vivió una de sus etapas más exitosas. Bajo su dirección, la Lazio ganó el Scudetto en la temporada 1999-2000, la Coppa Italia en 1998 y 2000, así como la Supercopa de Europa en 1999. Fue en este equipo donde coincidió con el chileno Marcelo Salas, formando una dupla técnica que llevó al conjunto romano a lo más alto del fútbol italiano y europeo.
En el año 2001, Eriksson fue nombrado seleccionador de la Selección de Inglaterra, convirtiéndose en el primer entrenador extranjero en dirigir al equipo nacional inglés. Durante su mandato, llevó a Inglaterra a los cuartos de final del Mundial de 2002 y de la Eurocopa 2004, destacando por su capacidad para gestionar un equipo plagado de estrellas.
Sven-Göran Eriksson también tuvo experiencias como entrenador en otros clubes y selecciones, incluyendo el Manchester City, el Leicester City, la Selección de México y la Selección de Costa de Marfil. Su influencia y conocimiento del juego le permitieron adaptarse a diferentes culturas futbolísticas y dejar su marca en cada equipo que dirigió.
A lo largo de su carrera, Eriksson fue reconocido no solo por sus logros deportivos, sino también por su estilo de liderazgo calmado y estratégico. Su enfoque meticuloso y su capacidad para sacar lo mejor de sus jugadores lo convirtieron en uno de los entrenadores más respetados y admirados en el mundo del fútbol.
El fallecimiento de Sven-Göran Eriksson ha dejado un vacío en la comunidad futbolística, pero su legado perdurará a través de los innumerables momentos de gloria que brindó a los aficionados y de las enseñanzas que dejó a sus colegas y jugadores.
“Tuve una buena vida, sí. Creo que todos tememos el día de nuestra muerte. Pero la vida también se trata de la muerte (…) Cuídense y cuiden su vida. ¡Y vívanla!”, fue el mensaje de despedida de Sven-Göran Eriksson, liberado hace cinco días en un documental sobre su vida en Amazon Prime.
La noticia de su fallecimiento ha sido recibida con gran pesar por parte de figuras destacadas del fútbol y por aficionados de todo el mundo. En redes sociales, numerosos clubes y exjugadores han expresado sus condolencias y han compartido recuerdos de su tiempo con el legendario entrenador.
