Escándalo de dopaje de Jannik Sinner sacude el mundo del tenis justo antes del US Open
El mundo del tenis ha sido sacudido por un escándalo de dopaje que involucra al actual número uno del mundo, Jannik Sinner. El jugador italiano ha dado positivo en dos controles antidopaje durante el torneo de Indian Wells. A pesar de estos resultados, Sinner no recibirá una suspensión y podrá competir en el US Open, que comienza el lunes. Esta decisión ha generado una ola de críticas y ha puesto en duda la transparencia de las agencias antidopaje y la ATP.
Varios jugadores destacados como Nick Kyrgios, Lucas Pouille, Denis Shapovalov, Tara Moore, Kamal Majchrzak, Tennis Sandgren y Gastao Elias, entre otros, han expresado su descontento con la decisión de no informar sobre el positivo hasta que un tribunal absolvió a Sinner. Como resultado, Sinner solo perderá los puntos y el dinero ganado en Indian Wells. Este clima de tensión y la percepción de un trato de favor hacia Sinner marcan el inicio del último Grand Slam de la temporada en Nueva York.
Las dudas físicas y mentales de Sinner, quien a pesar de todo ganó el torneo de Cincinnati hace una semana, se suman a la nefasta preparación de Carlos Alcaraz. Alcaraz decidió saltarse el torneo de Montreal para descansar tras un verano ajetreado y exitoso en el que conquistó Roland Garros y Wimbledon, y se adjudicó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París, donde también llegó a los cuartos de final en dobles junto a Rafa Nadal. Sin embargo, su regreso en Cincinnati fue decepcionante, ya que fue eliminado en su debut por Gael Monfils, que está a punto de cumplir 38 años.
En Flushing Meadows, Alcaraz busca continuar con su excelente registro en los grandes torneos de este año, habiendo ganado 18 partidos y perdido solo uno. Nueva York, con su ambiente vibrante y eléctrico, parece ser el torneo que mejor se adapta al carácter de Alcaraz, quien debutará ante Li Tu, un jugador de la fase previa. Debido a su condición de tercer cabeza de serie, podría enfrentarse a Sinner en semifinales y a Novak Djokovic en la final.
Hablando de Djokovic, el serbio tiene como objetivo alcanzar su 25º Grand Slam. En París, Djokovic cerró un nuevo capítulo de su leyenda y ya ha ganado absolutamente todo. En el US Open, donde tiene un récord de diez finales jugadas y solo cuatro ganadas, defiende título. Sin partidos previos, Djokovic compite por superarse a sí mismo y por poner el límite de los Grand Slams en 25.
En un circuito impredecible, con Alexei Popyrin coronado ganador de Masters 1.000 en Montreal y el irregular Frances Tiafoe finalista en Cincinnati, las alternativas a los mejores se multiplican. Sin embargo, es difícil predecir si jugadores como Daniil Medvedev, ganador en 2021 y finalista en 2019 y 2023, Alexander Zverev, Stefanos Tsitsipas y Casper Ruud, subcampeón en 2022, estarán a la altura.
Por otro lado, Paula Badosa ha tenido un resurgir en la gira americana y llega al US Open con grandes expectativas. Badosa tomó una difícil decisión en junio al renunciar a los Juegos Olímpicos para centrarse en su ranking protegido debido a una lesión que la tuvo fuera de las canchas durante seis meses. Esta estrategia le permitió llegar a los octavos de final en Wimbledon y asegurarse un lugar en el US Open, ascendiendo treinta posiciones en la clasificación mundial.
Badosa planificó un calendario con tres torneos previos a Nueva York y en Washington recibió una invitación que no desaprovechó, ganando el título, su primero desde enero de 2022. En Toronto, pagó el esfuerzo previo y solo pudo ganar un partido, pero en Cincinnati llegó hasta las semifinales, donde solo fue derrotada por Jessica Pegula en tres sets.
Ahora, Badosa es la número 27 del mundo y será cabeza de serie en el US Open, donde no tiene presión. Su techo en Nueva York es fácil de romper, ya que nunca ha pasado de segunda ronda en sus cuatro participaciones en el cuadro final. Aunque no es favorita a conquistar el título, como sí lo son Aryna Sabalenka e Iga Swiatek, la española ha demostrado que puede ganar a ambas. El resto de rivales, como Coco Gauff y Elena Rybakina, no han mostrado un gran estado de forma en la gira americana.
El camino de Badosa en el cuadro es espinoso a partir de la tercera ronda, cuando podría enfrentarse a la vigente ganadora de Wimbledon, Barbora Krejcikova. Después, podría enfrentarse a Victoria Azarenka o Maria Sakkari en cuartos y a la gran favorita, Aryna Sabalenka, en semifinales, evitando a Iga Swiatek hasta la final.