
El acceso a una vivienda asequible es una de las principales preocupaciones en España. Se trata de un desafío estructural que requiere una solución integral con mayor coordinación entre el sector público y el privado. Leopoldo Arnaiz Eguren, presidente de Arnaiz, firma líder en urbanismo y desarrollo inmobiliario global, analiza los factores que han agravado esta situación y plantea medidas concretas para impulsar la promoción de viviendas.
España enfrenta una crisis de vivienda. ¿Cuáles son los principales factores que la agravan?
El problema radica en el desequilibrio entre la oferta y la demanda. Actualmente, la necesidad de vivienda asequible es muy superior a la disponibilidad, lo que se debe a varios factores como la escasez de suelo urbanizado residencial, el aumento de los costos de construcción impulsado por la falta de mano de obra cualificada y el encarecimiento de los materiales, y la baja capacidad adquisitiva, ya que muchos ciudadanos no pueden acceder a una vivienda por los límites de financiación y las restricciones crediticias. Ante este panorama, el alquiler se presenta como una alternativa clave.
¿Es el alquiler una solución viable?
En teoría sí, pero en España aún no se ha consolidado como una opción estructural debido a la cultura de propiedad y la falta de garantías para los arrendadores. Muchos propietarios tienen reticencias ante los impagos y la rigidez normativa. Para fomentar el alquiler de forma sostenible, es imprescindible un marco legal equilibrado que brinde seguridad tanto a inquilinos como a propietarios.
¿La normativa actual dificulta la generación de vivienda asequible?
Sin duda. La regulación urbanística es excesivamente compleja y burocrática, lo que retrasa los proyectos y encarece la producción de vivienda. Si se quiere aumentar la oferta y reducir los costos, es clave simplificar y agilizar la normativa urbanística y establecer un marco regulador homogéneo para la vivienda protegida facilitando su financiación.
El acceso a la financiación sigue siendo un obstáculo. ¿Qué medidas se podrían aplicar?
Se necesita un sistema de financiación más flexible. Algunas soluciones viables incluyen hipotecas a largo plazo con una mayor proporción del costo y tipos de interés reducidos, incrementar la financiación al promotor hasta el 90% del costo de la promoción lo que facilitaría el desarrollo de más proyectos, y establecer incentivos fiscales para la promoción de vivienda asequible permitiendo que el sector privado juegue un papel más activo sin depender de la intervención pública.
¿Es viable apostar por la construcción industrializada para abaratar costes?
Sí, y debería impulsarse con más fuerza. La construcción industrializada y la vivienda prefabricada permiten reducir costos y tiempos de ejecución. Sin embargo, para que esta alternativa sea efectiva, es clave que las administraciones ofrezcan incentivos y facilidades de financiación.
¿Qué medidas urgentes se deberían aplicar para incentivar la vivienda asequible?
Para lograr resultados a corto plazo, se deberían implementar de inmediato la agilización de la aprobación de suelos urbanizables para reducir el coste del suelo, el establecimiento de incentivos fiscales para los promotores que construyan vivienda asequible, la mejora del acceso a la financiación para compradores y promotores, y la flexibilización de la normativa de vivienda protegida simplificando su aplicación y tramitación.
¿Puede mejorar la situación de la vivienda en España en los próximos años?
Sí, pero solo con un enfoque pragmático y coordinado entre el sector público y el privado. No basta con buenas intenciones, se necesitan medidas concretas como ampliar y facilitar el acceso a suelo urbanizado, agilizar los trámites burocráticos, aumentar la financiación y fomentar la industrialización de la construcción. Si se avanza en estos aspectos, se podrá lograr un mercado de vivienda más equilibrado y accesible.