Revelan la Verdadera Naturaleza de una Bebida Tradicional de Fiestas Patrias: No es Vino


La popular bebida dieciochera, ampliamente celebrada y consumida durante las Fiestas Patrias, ha sido objeto de controversia tras revelarse que, en realidad, no es vino. Este descubrimiento ha generado una ola de reacciones entre los aficionados y expertos en enología, quienes se han apresurado a revisar y reflexionar sobre las implicancias de esta revelación.

Para comprender mejor el impacto de este hallazgo, es esencial explorar en profundidad la historia y la composición de esta bebida, así como las opiniones de distintos sectores de la sociedad. Desde su origen hasta su papel en la cultura y las celebraciones nacionales, este artículo pretende ofrecer una visión completa y detallada de un tema que, por momentos, parece haber sacudido las bases mismas de nuestras tradiciones.

Orígenes y Tradición

La bebida en cuestión, conocida coloquialmente como "Chicha", ha sido un pilar en las festividades de Fiestas Patrias durante generaciones. Su consumo está inextricablemente ligado a las celebraciones del 18 de septiembre, fecha en la que se conmemora la primera Junta Nacional de Gobierno en Chile. Durante estas festividades, la chicha se presenta como una alternativa al vino, siendo apreciada por su sabor dulce y su capacidad para acompañar una variedad de comidas tradicionales.

Históricamente, la chicha se ha elaborado a partir de la fermentación de frutas, principalmente uvas y manzanas, aunque en algunas regiones se utilizan otros ingredientes como el maíz. Este proceso de fermentación es lo que ha llevado a muchos a clasificarla erróneamente como vino, aunque las diferencias en métodos de producción y composición química son significativas.

Descubrimiento y Análisis

Recientemente, un grupo de enólogos y científicos del Instituto Nacional de Enología y Viticultura llevó a cabo un estudio exhaustivo sobre la chicha. Utilizando avanzadas técnicas de análisis químico y sensorial, el equipo descubrió que la composición de la chicha difiere notablemente de la del vino. Aunque ambos productos son fermentados, la chicha contiene niveles más altos de azúcar residual y una menor concentración de alcohol en comparación con el vino.

Además, la fermentación de la chicha es significativamente más corta, lo que resulta en un perfil de sabor y aroma distinto al del vino. Estos hallazgos fueron presentados en un congreso de enología, donde se concluyó que, desde un punto de vista técnico, la chicha no puede ser clasificada como vino.

Reacciones y Opiniones

La reacción ante este descubrimiento ha sido diversa. Por un lado, los puristas del vino han acogido la noticia con interés, señalando la importancia de distinguir entre distintos tipos de bebidas fermentadas. Enólogos y sommeliers han subrayado la necesidad de educar al público sobre las diferencias entre la chicha y el vino, promoviendo un mayor entendimiento y apreciación de ambos productos.

Por otro lado, muchos consumidores y defensores de las tradiciones han expresado su sorpresa e incluso su descontento. Para ellos, la chicha es más que una bebida; es un símbolo de identidad y celebración. La revelación de que no es técnicamente vino no disminuye su valor cultural ni su papel en las festividades dieciocheras. Es más, algunos argumentan que esta distinción científica no debería afectar el disfrute y la tradición asociada a la chicha.

Implicaciones para la Industria

Desde una perspectiva comercial, este descubrimiento podría tener varias implicaciones. El etiquetado y la comercialización de la chicha podrían requerir ajustes para reflejar con mayor precisión su naturaleza. Las regulaciones sobre bebidas fermentadas podrían revisarse para asegurar que los consumidores reciban información clara y precisa sobre los productos que compran.

Además, esta clarificación podría abrir nuevas oportunidades para los productores de chicha. Al ser reconocida como una categoría distinta de bebida fermentada, la chicha podría ganar un mayor reconocimiento y aprecio en mercados nacionales e internacionales. Los productores podrían desarrollar nuevas estrategias de marketing que destaquen las características únicas de la chicha, diferenciándola del vino y resaltando su singularidad.

Una Oportunidad para la Educación

Este hallazgo también representa una oportunidad invaluable para la educación enológica. Instituciones académicas y organizaciones dedicadas a la promoción del vino y otras bebidas fermentadas pueden utilizar esta información para desarrollar programas educativos que profundicen en la historia, la producción y las características de la chicha. Esto no solo beneficiaría a los enólogos y sommeliers en formación, sino que también podría enriquecer el conocimiento del público general sobre las bebidas tradicionales.

Conclusión

En resumen, la reciente revelación de que la popular bebida dieciochera, la chicha, no es técnicamente vino, ha generado un debate significativo y ha resaltado la importancia de entender y apreciar las diferencias entre diversas bebidas fermentadas. Aunque este descubrimiento puede haber sorprendido a muchos, también ofrece una valiosa oportunidad para la educación y la celebración de nuestra rica tradición enológica.

Al final del día, la chicha sigue siendo una parte integral de nuestras Fiestas Patrias, un símbolo de celebración y comunidad que trasciende las definiciones técnicas. Este nuevo entendimiento no disminuye su valor, sino que lo enriquece, invitándonos a explorar y disfrutar de nuestras tradiciones con una nueva perspectiva.

PorJulieta Quezada Campos

Sep 4, 2024
¿Qué? Determinan que popular bebida dieciochera en realidad no es vino

El «Pipeño» no es vino. No siempre al menos. Así lo confirmó el SAG este martes, refiriéndose a la polémica Resolución Exenta publicada el año pasado, la cual reconoció a esta bebida alcohólica derivada de la uva como única en su clase, diferenciándola del «Vino Pipeño».

Considerada como una bebida alcohólica con características propias y diferentes al vino, el ente designó una categoría exclusiva para esta, la cual lleva su mismo nombre. ¿Qué características debe cumplir una bebida para ser considerada como Pipeño? ¿Cuál es la diferencia entonces entre Pipeño y Vino Pipeño?

Diferencias entre Pipeño y Vino Pipeño

Uno de los principales usos del Pipeño en estas fechas es para preparar el tradicional trago dieciochero “Terremoto”, que mezcla esta bebida con helado de piña y granadina.

A la hora de prepararlo, se puede optar por Vino Pipeño o Pipeño, dependiendo de las preferencias o disponibilidad al alcance de cada persona, ¿cuál es la diferencia?

Según la Resolución Exenta N.º 4077/2023, para que una bebida sea considerada bajo la nueva clasificación de «Pipeño», esta debe cumplir con las siguientes condiciones:

  • Debe estar elaborada a partir de la fermentación alcohólica parcial del mosto de uvas frescas de variedades viníferas.
  • No se le puede adicionar agua ni azúcares externos para modificar su graduación alcohólica o dulzor.
  • Debe tener una graduación alcohólica inferior 11,5° GL.
  • Debe tener un contenido de acidez volátil inferior a 1,5 g/L expresado en ácido acético.
  • Su producción y envasado se debe dar en las comunas vitícolas de las regiones del Maule, Ñuble y Biobío.
  • Ser producido y envasado por personas naturales o jurídicas pertenecientes al segmento de la Agricultura Familiar Campesina o Cooperativas integradas por estas.

Según indica la citada resolución, este tipo de bebidas alcohólicas son productos con una fuerte identidad territorial y una gran reputación. Por ende, su elaboración por parte de la Agricultura Familiar Campesina, de manera no industrial, les otorga un carácter distintivo.

Sin embargo, debido a que tienen una graduación alcohólica inferior a 11,5° GL, no pueden comercializarse como vino.

En un reciente comunicado, el SAG clarificó que es fundamental entender que, mientras el Pipeño no es considerado vino bajo la normativa actual, el Vino Pipeño sigue existiendo como una categoría separada, afecto a la normativa vigente para vinificación y elaboración del vino, y con una producción que puede realizarse a nivel nacional por cualquier razón social.

Valorización y protección del Pipeño

Entre los motivos que brindó la autoridad para efectuar una distinción especial entre Pipeño y Vino Pipeño, se incluye:

— La valorización de los productos locales en el mercado nacional e internacional.

— El resguardo de su identidad como una bebida alcohólica auténtica, característica de las regiones del Maule, Ñuble y Biobío.

— Otorgarle una protección especial y asegurar su posición como parte del patrimonio cultural chileno.

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