Ricardo Gareca, el seleccionador argentino de La Roja, expresó su decepción por la eliminación de su equipo en la Copa América, y señaló que no estaba satisfecho con el desempeño ofensivo del equipo. Sin embargo, mostró un grado de satisfacción con la conducta de su equipo de cara a las eliminatorias para el Mundial 2026 que se reanudará en septiembre.
En su declaración a la prensa a su llegada al aeropuerto de Santiago, Gareca admitió que el equipo tenía expectativas más altas. «Nunca nos encontramos, por lo menos de lo que habíamos insinuado en los partidos anteriores. El equipo se mostró sólido, pero eso no nos conforma, lógicamente necesitamos hacer goles, se necesitan para ganar. En general estamos conformes más que nada con el comportamiento», dijo.
Gareca asumió plena responsabilidad por el rendimiento de Chile en el certamen continental. Señaló que él y su equipo son los responsables de la idea de juego, la formación del equipo y los cambios realizados, por lo que tienen una gran autocrítica en ese aspecto. Durante el torneo, Chile no marcó goles y terminó con dos empates ante Perú y Canadá y una derrota frente a Argentina por el grupo A.
El entrenador argentino también criticó las decisiones del árbitro colombiano Wilmar Roldán en el partido contra los canadienses, que resultaron en la expulsión del lateral Gabriel Suazo y no sancionaron un codazo en contra del mediocampista Rodrigo Echeverría. Gareca calificó estas decisiones como «apresuradas» y expresó su desacuerdo con la interpretación de los incidentes.
En cuanto a su suspensión que le impidió dirigir el tercer partido, Gareca comentó la dureza en la aplicación del reglamento sin tener en cuenta otras condiciones. «Solo pasó un minuto en el que un jugador no llegó a tiempo y es el técnico el que paga las consecuencias. Tratamos de hacer todo lo posible, la caminata era muy larga desde los vestuarios a la cancha y tratamos de acomodarnos de la mejor manera, pero lamentablemente me suspendieron un partido», lamentó.
A pesar de los resultados decepcionantes, Gareca destacó que las actuaciones individuales de algunos jugadores fueron importantes. Este es un aspecto que le da tranquilidad mientras se prepara para las eliminatorias al Mundial de 2026. Al asumir la conducción de la selección chilena en enero pasado, su objetivo principal fue clasificar para el Mundial.
Gareca anticipó un período de análisis profundo del rendimiento del equipo, ya que La Roja volverá a competir en septiembre próximo por la eliminatoria sudamericana, en la que se encuentra en la octava posición, fuera de los puestos que dan acceso al Mundial.
El desempeño de La Roja en la Copa América ha generado una serie de interrogantes sobre su capacidad para competir a nivel mundial. Aunque el rendimiento ofensivo del equipo no fue satisfactorio, el comportamiento del equipo en general ha sido motivo de satisfacción para Gareca. Con su visión y la determinación de los jugadores, el equipo buscará dar lo mejor de sí mismo en las próximas eliminatorias al Mundial.