El próximo 26 de abril marca el inicio de una nueva era laboral en nuestro país con la implementación de la Ley 40 Horas. Esta ley, que marca una reducción gradual del horario laboral, es la respuesta a la creciente necesidad de mejorar el equilibrio entre la vida laboral y personal, y a la necesidad de una mejor calidad de vida para los trabajadores.
La Ley 40 Horas dicta que a partir de esta fecha, la jornada laboral semanal se reducirá obligatoriamente de 45 a 44 horas. Este es el primer paso en un camino que llevará a una jornada laboral de 40 horas para el año 2028. Sin embargo, la ley va más allá del mero recorte de horas y presenta una serie de novedades en el marco laboral.
Una de las principales características de la ley es la opción de la fórmula 4×3. Esta fórmula permite a los empleadores y a los trabajadores acordar un horario de trabajo que comprenda cuatro días de trabajo seguidos de tres días de descanso. Por ejemplo, los empleados podrían trabajar de lunes a jueves y descansar el viernes, sábado y domingo. Según la ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, para que esta distribución de la jornada laboral sea posible, las empresas deben adelantarse a la gradualidad de cinco años, reduciendo la jornada laboral a 40 horas semanales desde ya.
El objetivo principal de esta ley es permitir a los trabajadores tener más horas de descanso efectivo. En palabras de la ministra, esta ley está inspirada en la idea de proporcionar más tiempo para la familia.
Francisco Brizuela, Seremi del Trabajo, señaló que ya existen en la región más de 20 empresas certificadas con el Sello 40 horas, las cuales han implementado con éxito la jornada laboral 4×3, mostrando mejoras tanto en la productividad como en la calidad de vida de los trabajadores.
En palabras de la Seremi de Gobierno, Paulina Mora, el paso a las 40 horas es un avance significativo hacia una mayor calidad de vida y bienestar para los trabajadores y sus familias, y es un testimonio de la capacidad de Chile para construir un mejor país.
Uno de los aspectos destacados de esta Ley es la posibilidad de compensar las horas extraordinarias con días adicionales de descanso. Según la nueva Ley, se pueden pactar hasta cinco días hábiles de descanso adicionales al año, que el trabajador debe utilizar en los seis meses posteriores al ciclo en que se originaron las horas extraordinarias.
Para solicitar estos días adicionales de descanso, el trabajador debe notificar al empleador con 48 horas de anticipación. Si no se solicitan en el momento indicado, se les pagará dentro de la remuneración del respectivo período.
La compensación de las horas extra por días de descanso adicionales se regirá por el mismo recargo que corresponde al régimen actual de pago de horas extraordinarias. Es decir, por cada hora extraordinaria trabajada, el trabajador recibirá una hora y media de descanso.
En caso de que al finalizar la relación laboral existan días de descanso pendientes de utilización, estos serán compensados.
En resumen, la Ley 40 Horas es un paso significativo hacia la creación de un ambiente laboral más saludable y equilibrado. A través de medidas como la reducción de la jornada laboral y la posibilidad de acordar un horario de trabajo flexible, esta Ley busca mejorar la calidad de vida de los trabajadores y sus familias, y en última instancia, contribuir a un mejor Chile.
