El pasado lunes por la tarde, en el CESFAM Emilio Schaffhauser, ubicado en el centro de La Serena, Chile, se registró un incidente altamente preocupante. Según informes de testigos, un médico que previamente había prestado servicios en el centro de salud, pero que había sido desvinculado por comportamientos conflictivos con sus compañeros, irrumpió en las instalaciones en un estado de alteración visible.
El individuo, identificado como Nicolás Andrés Pinochet García, aparentemente estaba buscando a la directora del centro de salud. Sin embargo, ante la incapacidad de localizarla, intentó incendiar el edificio. Los informes indican que Pinochet García roció lo que parecía ser gasolina en el exterior del edificio e intentó prenderle fuego. Afortunadamente, otros pacientes y personal del centro de salud lograron contenerlo antes de que pudiera causar daños significativos.
Pinochet García cuenta con seis antecedentes penales por diversos delitos, aunque ninguno de ellos está actualmente vigente. Según Rodrigo Fernández Zumarán, director del Departamento de Salud de la Corporación Municipal, el médico había sido apartado del CESFAM hace un mes debido a «circunstancias y situaciones lamentables de violencia en sus relaciones laborales con sus compañeros de trabajo».
Zumarán también expresó su profundo pesar por la situación vivida por la directora del centro. “Este profesional de la salud realizó una serie de amenazas y además puso en riesgo la situación física de la directora”, comentó.
Posteriormente, la directora del centro de salud acudió a Carabineros para denunciar el incidente. “La misma directora acudió a la comisaría donde realizó el relato de las situaciones junto con entregar el nombre del involucrado, además de reforzar su declaración con las personas que fueron testigos del suceso”, afirmó Fernández.
Hasta el momento, el médico involucrado en este incidente se encuentra prófugo. La institución afectada ha presentado una querella judicial en contra del sujeto. Este incidente resalta la importancia de la seguridad en los centros de salud y pone de manifiesto los riesgos a los que pueden estar expuestos tanto los pacientes como el personal sanitario.
La seguridad en los centros de salud es un tema de gran importancia que ha cobrado relevancia en los últimos años. Los incidentes de violencia en estos espacios pueden tener graves consecuencias, no solo para el personal sanitario, sino también para los pacientes que se encuentran en el lugar.
En este caso, la rápida intervención de otros pacientes y personal del centro de salud pudo evitar un desastre mayor. Sin embargo, este incidente pone de manifiesto la necesidad de contar con medidas de seguridad adecuadas en estos espacios.
La salud y el bienestar de las personas es de vital importancia. En un centro de salud, tanto los pacientes como el personal sanitario deben poder sentirse seguros. Este incidente es un recordatorio de que las amenazas a la seguridad pueden surgir en cualquier momento y lugar.
La violencia en el lugar de trabajo es un problema serio, y en un entorno de atención médica, puede tener consecuencias potencialmente mortales. Los centros de salud deben estar preparados para lidiar con este tipo de situaciones, y deben contar con protocolos de seguridad adecuados para proteger tanto a los pacientes como al personal sanitario.
La rápida intervención de los presentes en el lugar del incidente, así como la acción inmediata de la directora en denunciar el hecho a Carabineros, son ejemplos de cómo se puede manejar este tipo de situaciones. Sin embargo, es fundamental que los centros de salud estén preparados para lidiar con incidentes de esta naturaleza.
Este incidente sirve como un recordatorio de que la seguridad no debe ser tomada a la ligera. La protección de pacientes y personal sanitario debe ser una prioridad en todos los centros de salud. La prevención y la preparación son clave para evitar que incidentes como este ocurran en el futuro.