Con el inicio del verano, el Partizan de Belgrado ha anunciado el final de una era significativa en su historia, marcada por la salida de dos de sus jugadores más emblemáticos, Kevin Punter y Zack LeDay. Estos jugadores fueron fundamentales en la evolución del club serbio durante los últimos tres años, y su salida marca el comienzo de una etapa de reconstrucción bajo la batuta del entrenador Zeljko Obradovic.
En palabras del propio Obradovic, recogidas por SportKlub, «Créanme, todos en el club estamos trabajando para ver qué sería lo mejor para nosotros en este momento. Como cada año se mencionan muchos nombres, es lógico, también hay rumores y hay mucha información sin confirmar. Hasta el momento en que alguien firme, teniendo experiencia del año pasado, no se puede garantizar nada». Esta declaración refleja la incertidumbre que rodea al club en estos momentos de cambio.
Por el momento, el club ha permitido que Kevin Punter y Zack LeDay se marchen libres a pesar de tener contrato en vigor. Además, la continuidad de Aleksa Avramovic está en el aire, y los contratos de jugadores como James Nunnally, Alen Smailagic, Danilo Andjusic, Jaleen Smith o Uros Trifunovic terminan este mes de junio, lo que podría provocar una reestructuración importante de la plantilla.
En sus conversaciones con los jugadores, Obradovic ha sido claro y directo: «Les dejamos claro a todos que no quiero mantener a nadie en el equipo si por alguna razón no se siente feliz y satisfecho. Hubo casos en los que algunos jugadores no entendieron qué es el Partizan, qué deben hacer por el Partizan, cómo comportarse. En ese sentido tomamos algunas decisiones y tomaremos algunas decisiones». Esta actitud refleja el deseo del entrenador de construir un equipo comprometido y apasionado por el club.
A pesar de estas salidas, el Partizan no se queda de brazos cruzados en la planificación de su próxima temporada. Ya se han cerrado los fichajes de Vanja Marinkovic, Iffe Lundberg y Frank Ntilikina, tres jugadores que podrían aportar mucho al club en esta nueva etapa.
La reconstrucción del Partizan está en marcha, y aunque el camino puede ser incierto y lleno de desafíos, las palabras de Obradovic transmiten una sensación de esperanza y determinación. La próxima temporada será crucial para el futuro del club serbio, y todos los ojos estarán puestos en su evolución.
El deseo del entrenador es claro: construir un equipo que entienda lo que significa el Partizan, un equipo que esté comprometido y apasionado por el club. Con esta actitud, y con los nuevos fichajes, el Partizan está preparado para enfrentarse a los desafíos que se le presenten en el camino hacia la reconstrucción.
El futuro del club serbio está en juego, y la próxima temporada será una prueba crucial para el equipo. Pero con Obradovic al mando y con la determinación de construir un equipo fuerte y comprometido, el Partizan está listo para afrontar el desafío.