Cruce de Acusaciones Entre Parlamentarios Socialistas por Caso Hermosilla
Durante la noche de este miércoles, las redes sociales fueron el escenario de un intenso y **agresivo cruce** entre dos parlamentarios socialistas, el senador Fidel Espinoza y el diputado Daniel Manouchehri. El motivo de la disputa fue el **bullado caso Hermosilla**.
Todo comenzó en la tarde cuando Espinoza, desde su posición en la cámara alta, reaccionó a una declaración de Manouchehri publicada en El Mostrador. En su calidad de presidente de la **comisión investigadora de la Cámara** por el **caso Audio**, Manouchehri afirmó: «Todos los caminos llevan a Chadwick».
Manouchehri sostuvo que «pareciera que no solo es un chat (de Hermosilla) con el señor Chadwick, sino que es alguien que está en el corazón de las operaciones». Estas declaraciones no tardaron en causar la molestia de Espinoza, quien respondió en X (anteriormente conocida como Twitter): «Con Chadwick discrepo en todo, pero no seas aprovechador. Cuando presides una comisión investigadora debes ser serio. Deja que la justicia haga su trabajo. Guardaste silencio con tus amigos del Frente Amplio en el caso Convenios. Oportunista. Amenazas a jueces con acusaciones. Pero tus amigos no se tocan».
**Daniel Manouchehri** no tardó en replicar, también en duros términos: «No nos intimidas, matón. Tu defensa a Chadwick y a la red de corrupción de Hermosilla es una vergüenza para el socialismo», escribió en la misma red social. «No es raro que te elogien tus amigos de la ultraderecha, como Moreira (Penta-Guerra-Hermosilla) y el ejército de bots», añadió. Además, negó la acusación de fondo hecha por Espinoza. «Por lo demás, tú y tus patrañas. Es mentira que ‘guardamos silencio’ en el caso fundaciones, y es falso que son mis amigos. Ni los conozco, mentiroso. No solo lo condenamos, incluso presentamos el proyecto “**fundaciones transparentes**”, insistió.
De un Test de Drogas a Abrir las Cuentas Corrientes
Más allá del **caso Hermosilla**, la disputa entre los parlamentarios continuó con ataques más personales. Espinoza retó a Manouchehri diciendo: «A mí no me maltratas. Te invito a que me digas el día y la hora, para que públicamente me cites a la clínica que quieras y nos hagamos ante todo Chile un **test de drogas**. A ver si después de eso podrás seguir hablando de delitos, drogas y todo lo demás», publicó Espinoza.
Manouchehri no se amilanó y respondió rápidamente con el resultado de su test de drogas, fechado el 14 de agosto y que se realizó como parte del reglamento interno de la Cámara. «También si quieres abrimos las **cuentas corrientes**. Nada que temer», dijo en directa alusión a los cuestionamientos que ha recibido el senador por su patrimonio. “No me intimidas, matón”, concluyó.
Este **enfrentamiento público** entre dos figuras del **Partido Socialista** pone de manifiesto las tensiones internas en un momento en que el caso Hermosilla y el caso Audio han capturado la atención mediática y pública. A medida que la investigación avanza, es probable que sigan surgiendo más revelaciones y que las disputas internas continúen afectando la cohesión del partido.
La batalla en redes sociales también ha dejado claro que ambos parlamentarios están dispuestos a utilizar todos los medios a su disposición para defender sus posiciones y desacreditar a sus adversarios, incluso si esto significa exponer sus diferencias y acusaciones en un foro público.
El **senador Fidel Espinoza**, conocido por su carácter confrontacional, y el diputado Manouchehri, con su postura firme en la comisión investigadora, han llevado sus diferencias a un nivel de exposición que pocos esperaban. Esta disputa, además de tener implicaciones políticas, también ha capturado la atención de la opinión pública, que sigue de cerca cada nuevo desarrollo en el caso Hermosilla y las repercusiones que pueda tener dentro del Partido Socialista y en el panorama político general.
La controversia también pone en evidencia las diferencias de enfoque entre los dos parlamentarios. Mientras Espinoza pide dejar que la justicia haga su trabajo, Manouchehri insiste en la necesidad de una **investigación exhaustiva** y transparente, defendiendo su papel en la comisión investigadora y recordando las iniciativas legislativas presentadas para aumentar la transparencia en el manejo de fundaciones y recursos públicos.
En medio de este intenso intercambio, la figura de **Andrés Chadwick** ha sido un punto focal. Las acusaciones hacia Chadwick, que implican una conexión con Hermosilla y su red de corrupción, han sido un tema recurrente que ha polarizado aún más las opiniones dentro y fuera del partido. La insistencia de Manouchehri en esta conexión y la defensa de Espinoza, aunque crítica, han avivado el debate sobre la integridad y las prioridades dentro del Partido Socialista.
Asimismo, la referencia a **casos anteriores** como el caso Convenios y la mención de figuras de la ultraderecha como Moreira, han ampliado el espectro de la disputa, llevando la conversación a temas de corrupción y alianzas políticas que trascienden el caso específico de Hermosilla.
Este episodio también destaca el poder de las redes sociales como plataforma para la confrontación política y cómo los políticos la utilizan no solo para comunicar sus posiciones, sino también para **desacreditar a sus adversarios** y movilizar a sus seguidores. En un contexto donde la **transparencia y la lucha contra la corrupción** son temas de alta sensibilidad, estos enfrentamientos públicos reflejan la complejidad y las múltiples capas de la política actual.
En definitiva, el cruce entre Espinoza y Manouchehri no solo es un reflejo de las tensiones internas dentro del Partido Socialista, sino también un indicativo de cómo las disputas políticas se desarrollan en la era digital, donde cada declaración y cada respuesta son escrutadas y amplificadas por una audiencia ávida de información y posicionamientos claros.