En un golpe devastador para el fútbol ruso, el PFC Sochi, bajo la dirección de Robert Moreno, podría confirmar su descenso a la segunda división este sábado. Moreno asumió el papel de entrenador el 23 de diciembre, en un momento en que la suerte del equipo ya parecía estar sellada. El PFC Sochi es un club que, en muchos aspectos, parece artificial, habiendo surgido en el contexto de los Juegos Olímpicos de Invierno 2014 en Sochi como una especie de creación estratégica del presidente Vladimir Putin para justificar la ubicación de los juegos en Adler, a unos 30 km al este de la sede oficial.
La localidad costera del Mar Negro, a menudo referida como la ‘Marbella rusa’, albergaba a un equipo poco impresionante llamado Zhemchuzhina (‘Perla’) que oscilaba entre la segunda y tercera división del fútbol ruso. Después de su último ascenso, el equipo desapareció en 2011, dejando a Sochi sin equipos deportivos de élite a pesar de contar con instalaciones modernas. Esta situación persistió incluso durante la celebración de los Juegos de Invierno en el anillo olímpico de Adler y las montañas de Krasnaya Polyana.
El Estadio Olímpico ‘Fisht’ cerró para remodelaciones después de albergar las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Invierno en 2017, y se reabrió en el mismo año. En 2018, el Dinamo St. Petersburgo se ‘trasladó’ a Adler (Gran Sochi). Antes de esto, en 2014, se fundó el Sochi de hockey sobre hielo, que compite en la Liga Continental en el Gran Palacio de Hielo Olímpico, con capacidad para 12.000 espectadores.
El equipo de fútbol del PFC Sochi logró ascender a la Premier Liga rusa en 2020, pero la temporada actual ha demostrado ser desafiante. Al entrar en el parón de diciembre, el equipo acumulaba 12 puntos en 19 partidos, a cuatro puntos de la promoción y a ocho de la salvación, con una media de 0,63 puntos por partido bajo la dirección de Aleksandr Tochilin.
Después de rechazar ofertas de Turquía y Kosovo, el exseleccionador español Robert Moreno asumió el reto con solo 12 partidos por delante. A pesar de los cambios en el banquillo y los refuerzos invernales, el equipo sigue en último lugar con 23 puntos y solo dos jornadas restantes, a tres puntos del Baltika de Kalinigrado y a seis del Orenburg y del Ural de Ekaterinburgo.
Entre los nuevos fichajes, destaca el joven delantero venezolano Saúl Guarirapa, cedido por el Caracas FC, que ha marcado cinco goles. También se unieron al equipo el austríaco Aleksandar Jukic, procedente del Austria Viena, el chileno Ignacio Saavedra de la Universidad Católica, y el marroquí Yahia Attiyat Allah del Wydad.
Con este panorama, el Sochi se enfrentará a un descenso casi seguro a la Segunda División (FNL) si no logra vencer al Krasnodar, que aspira al título, este sábado. Incluso si logra sorprender a su rival, el equipo descendería en esta penúltima jornada si el Ural y el Orenburg empatan en su próximo encuentro.