En una reciente declaración, Andrés Nazer, gerente regional de Aguas del Valle, anunció que la empresa sanitaria ha elevado su estado a Alerta Amarilla debido al sistema frontal activo en la región de Coquimbo. Aunque la situación está siendo monitoreada de cerca, el suministro de agua sigue funcionando con normalidad en toda la región.
El aumento de la turbiedad en las fuentes de agua, provocado por la bajada de las quebradas, ha ocasionado que estas contengan un considerable volumen de barro, piedras y palos. Este fenómeno ha motivado el cierre de varias captaciones en áreas como Sotaqui, Las Rojas, El Quillay en Combarbalá y Álvarez Pérez en Illapel. A pesar de estos cierres, Nazer aseguró que el servicio de agua potable se mantiene normal para sus clientes y que se informará oportunamente cualquier evolución en la situación.
En este contexto, Aguas del Valle reitera la importancia de un buen uso de los sistemas de recolección de aguas servidas. Insta a la comunidad a evitar abrir las tapas de las cámaras, arrojar elementos indebidos a la red o conectar los ductos de evacuación de aguas de lluvia al alcantarillado. Este tipo de acciones pueden causar obstrucciones o afloramientos, tanto en la vía pública como al interior de los hogares.
Según Nazer, se han registrado casos de afectaciones debido a la saturación del sistema de alcantarillados. Esto se debe a la incorporación excesiva de aguas de lluvia a la red de alcantarillado, cuya función principal es recolectar aguas servidas. Por este motivo, los equipos de Aguas del Valle continúan trabajando para atender este tipo de situaciones.
Además de los esfuerzos para mantener la normalidad en el suministro de agua, el gerente regional de Aguas del Valle recordó que el fono clientes 600 400 4444 está disponible las 24 horas del día. Este canal de comunicación permite a los clientes informar cualquier emergencia relacionada con el servicio de agua potable y aguas servidas.
La elevación del estado a Alerta Amarilla evidencia la gravedad de la situación climática en la región de Coquimbo. Esta medida es una respuesta a las intensas precipitaciones que han azotado la región, generando anegamientos, socavones y caída de árboles. Los expertos han señalado que estas condiciones climáticas son las más intensas de las últimas décadas, calificándolas como un «frente ochentero».
Esta situación refleja la importancia de la gestión adecuada de las aguas y la infraestructura sanitaria, especialmente en tiempos de crisis climática. Aguas del Valle, como proveedor de servicios esenciales, tiene la responsabilidad de garantizar el suministro de agua potable y el buen funcionamiento de los sistemas de recolección de aguas servidas. Consciente de esta responsabilidad, la empresa está tomando medidas preventivas y reactivas para minimizar el impacto de este sistema frontal en la región de Coquimbo.
A pesar de las adversidades actuales, la declaración de Nazer transmite un mensaje de tranquilidad a la comunidad de Coquimbo. Asegura que la empresa está monitoreando la situación de cerca y tomando las acciones necesarias para mantener el suministro de agua. Sin embargo, es fundamental que la comunidad también juegue un papel activo en la gestión de esta crisis, haciendo un uso adecuado de los servicios de agua y alcantarillado y reportando cualquier irregularidad a la empresa.