El juicio por el secuestro y asesinato de Alejandro Ponce, que tuvo lugar el 28 de noviembre pasado en Paihuano, dio un paso adelante ayer cuando el Ministerio Público comenzó a presentar sus pruebas. Así lo confirmó el fiscal jefe de Vicuña, Juan González, quien indicó que se presentaron testimonios de varios testigos durante la sesión del jueves.
Entre los testigos que declararon se encontraba “el Bonty”, quien presenció el traslado de Ponce a la casa de uno de los principales sospechosos del caso, identificado como J.M.O. También testificaron una de las hermanas de la víctima y uno de los primos que estuvieron presentes en el momento en que se descubrió el cadáver de Ponce en la casa.
Un testigo crucial fue el criancero que encontró el cuerpo de Ponce a la vera de la ruta Antakari, a unos 12 kilómetros de Vicuña. Él relató que el 16 de diciembre de 2022, mientras pastoreaba su ganado, vio a unos jotes revoloteando en el cielo. Pensando que se trataba de un animal muerto de su ganado, se acercó al lugar.
Al darse cuenta de que no era un animal, regresó a su hogar para almorzar y contó lo que había visto. Sus familiares le informaron que había un joven desaparecido desde hace algún tiempo. Fue entonces cuando el criancero decidió volver al lugar y confirmó que los restos que había visto antes eran de un cuerpo humano. El cadáver estaba cubierto con ramas y tierra.
El criancero informó a su familia y a su patrón de su hallazgo, quienes a su vez notificaron a los Carabineros. En ese momento, el cadáver presentaba un estado avanzado de descomposición. Sin embargo, debido a sus características físicas y vestimenta, se determinó que los restos pertenecían a Alejandro Ponce, el joven que había desaparecido el 28 de noviembre en Paihuano.
Cabe recordar que el cuerpo de Ponce fue arrojado en ese lugar por J.M.O., quien es el principal acusado en este caso, junto con otros tres sospechosos, por el secuestro y asesinato del joven.
El testimonio del criancero es una pieza clave en el juicio, ya que su descubrimiento permitió ubicar el cuerpo de Ponce y proporcionó pruebas cruciales para el caso. Además, el testimonio de «el Bonty», así como de la hermana y el primo de Ponce, proporcionaron detalles adicionales sobre los eventos que llevaron a la desaparición y muerte de Alejandro.
El juicio por el secuestro y asesinato de Alejandro Ponce es un caso que ha captado la atención de la opinión pública debido a su brutalidad y a las circunstancias que rodean la desaparición y muerte del joven. La presentación de pruebas por parte del Ministerio Público marca un hito importante en el proceso, que busca hacer justicia por la muerte de Alejandro y asegurar que los responsables sean llevados ante la justicia.
Con estos testimonios y pruebas presentados, el Ministerio Público espera poder construir un caso sólido contra los acusados. Sin embargo, el juicio continúa y se espera que se presenten más pruebas en las próximas sesiones. Este juicio es un recordatorio de la importancia de la justicia y de la necesidad de responsabilizar a aquellos que cometen actos de violencia y asesinato.