El domingo 9 de junio marca otro hito en el calendario político chileno, ya que los ciudadanos tendrán que votar en las primarias para determinar los candidatos a la gobernación regional y a las alcaldías. En la Región de Coquimbo, este proceso será fundamental para definir al próximo líder del pacto Chile Vamos, que será el candidato único a la gobernación regional, el cargo de elección popular más alto de la región.
Ante la importancia de este proceso, El Día y Mi Radio TV organizaron el primer debate regional, donde se presentaron los tres candidatos del pacto de centro-derecha a la gobernación regional. Los candidatos son Roberto Vega, abogado y exseremi de Minería; Cristian Rondanelli, chef y actual miembro del Consejo Regional; y Cristobal Juliá, meteorólogo y exdirector de la Dirección General de Aguas.
El debate, moderado por Roberto Dueñas, giró en torno a cuatro temas principales: la seguridad, la escasez hídrica, la ejecución presupuestaria y la recuperación de la confianza en el gobierno regional. Este último punto es especialmente relevante debido a la crisis institucional provocada por la polémica gestión de la gobernadora Krist Naranjo.
En cuanto a la seguridad, uno de los principales problemas que enfrenta la comunidad, Vega propuso la utilización de diversas herramientas para la ejecución del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). Mencionó la posibilidad de destinar hasta el 6% del presupuesto a equipamiento de seguridad ciudadana, como cámaras e inteligencia artificial. Rondanelli, por su parte, se centró en la prevención y propuso fortalecer la formación de carabineros en la Escuela de Formación de Ovalle. Mientras tanto, Juliá enfatizó en la necesidad de inteligencia para gestionar correctamente los recursos.
En relación con la ejecución presupuestaria, que ha sido uno de los problemas más grandes de la región, los candidatos presentaron diferentes propuestas. Rondanelli señaló que el problema radica en la falta de planificación y propuso la creación de convenios de programación con el Ministerio de Obras Públicas (MOP). Por su parte, Juliá criticó el enfrentamiento entre las autoridades y afirmó que es necesario mejorar los estándares de transparencia. Vega, en cambio, prometió sincerar las cifras de proyectos de arrastre y apuntó a la modificación de la glosa que permitirá contratar equipos técnicos para desarrollar proyectos en apoyo de los municipios más pequeños.
El tema de la escasez hídrica, una de las crisis más graves que enfrenta la región, también fue discutido durante el debate. Juliá propuso medidas a corto, mediano y largo plazo, incluyendo la creación de pozos profundos en la cabecera de los ríos y embalses cordilleranos, y la construcción de plantas desaladoras. Vega respaldó estas propuestas, pero también insistió en la necesidad de discutir soluciones, ya que los costos de la escasez los están pagando los agricultores. Rondanelli, por otro lado, mencionó proyectos que están en camino y también propuso trabajar en convenios de programación.
Finalmente, en cuanto a la recuperación de confianza en el gobierno regional, los candidatos coincidieron en la necesidad de mejorar el trabajo con los funcionarios. Vega propuso conversar con las personas que hacen el trabajo y dejar de lado la pirotecnia jurídica, mientras que Rondanelli destacó que son los funcionarios quienes más se han visto afectados por la crisis en el gobierno. Juliá, por su parte, enfatizó en la importancia de la empatía, el liderazgo y la capacidad de conversar con todos.
Este debate es un hito importante en el camino hacia las elecciones del 9 de junio, y es probable que las propuestas presentadas por los candidatos influyan en la decisión final de los votantes.